Réquiem Ad Solituninis




Es tu cálida piel de ángel caído
mi amparo, mi savia, mi alcázar...
apacible fuente de sabor prohibido
que cuan vasto y plácido mar
sumerge mis sentidos.

Que nunca se aparten de mi
tus caprichos lisonjeros
excelso dómine y consejero
que adoctrina mi vivir
con incitantes dialectos.

Lacerantes sueños raídos
ya no rugen en mi altar
con sus gritos lastimeros
de eco sordo y perdido.

Tu existencia fue mi castigo
y con deleite anuncio mi rezo
vivaz pésame para ti...
Soledad.
Porque aplaudo tu deceso.

Sylvia Pardo - La Piel del León
(Tinta sobre papel)

1 comentario :

  1. Alma, por fin logro comentarte. Siempre que veía tus latidos en mi blog y quería visitarte, me decía que tu perfil no estaba disponible :(
    Pero ahora que me has dejado el link a tu blog me siento muy feliz de poder conocer tu espacio.

    Qué alegría verme en tu sección "Almas que dicen". Es todo un honor que me tomes en cuenta.

    Te dejo muchas buenas vibras y gracias por siempre visitarme, my love.

    Muá.

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Possis loqui, si vis loqui, fac conclusi, si vis silentium